Parece que Zeekr está en proceso de pruebas de su nueva MPV, un segmento poco demandado en Europa pero que en China está en auge gracias a la nueva hornada de vehículos eléctricos de este segmento.
La Zeekr M Vision lleva siempre en desarrollo pensado en la conducción autónoma con aliados en China pero también en EEUU donde han realizado pruebas del autopilot con LiDAR.
El nuevo M Vision tendrá un nombre definitivo distinto pero tiene en común con el resto de los Zeekr que viene con plataforma SEA pero en este caso con la versión SEA-M y con el precio de referencia de 140.000$ por lo que será caro en cualquier caso.
¿Pero qué tiene de importante este segmento?
Pues que es el primero paso de los Robotaxis, un mercado que dentro de 5 años será muy importante tanto para Zeekr como para Tesla que quiere inundar el mercado con este servicio de taxis autónomos que permitan relegar a empresas como UBER a una versión antigua y menos productiva del transporte de pasajeros.
Entre las cualidades de este MPV de Zeekr, fabricante que tiene también una versión impresionante de monovolumen eléctrico como es el Zeekr 009, es que este se centra en los pasajeros y llega con configuraciones como 2 puertas correderas para facilitar el acceso de los pasajeros y versiones de 2+3 y de 3+3 plazas.
En el desarrollo de esta vehículo Zeeker cuenta con Waymo, empresa centrada en la conducción autónoma y que ya ofrece este servicio en EEUU pero por ahora solo en algunas ciudades o zonas concretas dada su dificultad tecnología todavía.
¿Será el futuro de transporte urbano?
Pues es una pregunta que mucha gente se hace, pero muchos también responden que existen los Taxis aunque también se olvidan que tienen un factor limitante, el conductor que necesita descansar, que puede cometer errores de conducción o no estar en condiciones óptimas para llevar a personas.
Los servicios como el Zeekr M Vision borran de un plumazo esas pegas y poner el foco en ahorro de costes, incremento de las horas operativas y la comodidad para los usuarios de taxis en confiar en una tecnología impersonal para lo bueno o lo malo.